A mi madre (carta de Kalla)

20 de mayo de 2014, Tlalnepantla, Lázaro Cárdenas. 

A mi madre.

Saludos:

Con el corazón en mano y el máximo respeto yo te escribo, sí, a ti, ser de luz que me tuviste por nueve meses dentro de ti. No hay palabras que describan tan bello sentimiento que siento hacia a ti, por tal motivo espero que leas estas palabras que vienen desde lo más profundo de mi corazón y que con mucho amor son dedicadas especialmente para ti.

Madre mía, por dónde empezar... Desde que supiste de tu segundo embarazo como tanto me lo has platicado, llena de alegría y entusiasmo, en tu cuerpo ya me encontraba, le contaste a papá sobre el segundo bebé que venía en camino y él como tú se sentían bendecidos, pasaron los meses y semana a semana un bello milagro ya crecía en tu ser, así pasaron los dos primeros trimestres y cada vez se acercaba la hora de conocer al nuevo integrante de la familia, como me has contado continuamente tú al saber que esperabas a una niña morías de ternura... Y por fin llegó el día tan esperado, el día en donde tocarías con tus propias manos a ese hermoso humano que cargaste durante 9 meses. Al nacer casi para medio día los doctores dijeron que había un pequeño problema y tú con algunas lágrimas no sabías que pasaba pero no hubo que preocuparse puesto que fue una falsa alarma, y, ya cuando me tuviste en tus brazos sonreías hasta enloquecer.

Por eso y muchas cosas más te agradezco, tú que nos has dado todo a mí y a mis hermanos, que nos has enseñado buenos hábitos y sobre todo a luchar por lo que queremos, tú que rolas turnos cada dos semanas en una fábrica que al menos sale lo indispensable para los gastos básicos del hogar, tú y mi padre han sido buenas personas, que nos han inculcado valores y sobre todo a no juzgar a nadie sin conocerlo pues detrás de esa persona hay una vida y hay una historia.

Ahora yo con dieciséis años y con una vida por delante te puedo decir que me siento realmente agradecida de estar viva, agradecida contigo porque me diste la oportunidad de saber lo que puede ser la vida, no importa si hay problemas en el camino pues tu siempre sabrás aconsejarme y yo sabré que hacer. Además de eso, quiero inmensamente a mi abuela porque con ella he pasado mucho tiempo y me ha contado como le ha ido en la vida, gracias a sus experiencias que me han marcado, he llegado a comprender muchas cosas, cosas que tienen que ver contigo y con mis tíos así como ver desde otro punto de vista la vida y sobre todo a tener los ojos abiertos ante cualquier situación que se presente.

Y sobre todo porque somos mujeres, la diosa en nosotras habita y cada día me siento orgullosa de serlo pues muchas veces me has dicho que cuando sea madre entenderé mejor las cosas. Yo sé que los primeros días de vida que tiene la madre con el bebé son extraordinarios pues hay una conexión tan especial que se crean nuevas visiones de cómo es el mundo y lo más importante la vida. Así que seguiré luchando por lo que quiero, gracias a ustedes mis padres que hacen todo lo posible para que tengamos lo mejor y, aunque a veces no pensamos de la misma manera eso ni nadie podrá arrancar este amor que siento por ustedes. En cuanto a tus nietos que con gran ilusión tú los esperas, te puedo asegurar que anhelo ser madre y les enseñaré este grandioso camino tal y como tú lo hiciste y sin duda les hablaré muchas veces de las dos grandes mujeres que habitan en mi corazón. Por eso y más te agradezco…

Con cariño tu hija.

Kalla.

Imagen: del álbum Mujeres de la Tierra de Siela Bruma

** Esta carta participa en el Concurso "Carta a mi Madre", donde se recibieron cartas hasta el día 21 de mayo. ¡Vota por tu carta favorita!  A partir de hoy y hasta el 27 de mayo, se harán las votaciones en el álbum de Facebook: https://www.facebook.com/media/set/?set=a.643734482379188.1073741843.226735054079135&type=1