El jengibre originalmente llegó de Asia, pero ahora se siembra en distintas partes del mundo, incluyendo México y Jamaica, por ejemplo.
Puede encontrarse todo el año en los mercados y supermercados. Para saber si es de buena calidad, elije uno firme y vibrante. Si está muy arrugado o suave, no lo compres.
Tiene un sabor picante. El jengibre seco es más picante que el fresco y es por esto que al jengibre seco se le clasifica como “muy caliente” y al fresco como “moderadamente caliente”
Se acostumbra después de tomar alimentos para ayudar al proceso digestivo. Es muy bueno para malestares estomacales cuando algo nos ha caído pesado.
Puede incluirse en los alimentos y de hecho, se le utiliza para conservar alimentos para que sean más seguros. Normalmente, se utiliza en platillos que incluyen carne.
Es excelente para aliviar distintos tipos de dolores y calmar espasmos, lo que lo hace un gran aliado para las mujeres que padecen cólicos menstruales. También se le conoce y aprecia por su propiedad de ser un "regulador hormonal natural".
Puede actuar sobre los receptores de dolor y por esto también se utiliza para la osteoartritis y la artritis reumatoide. Funciona especialmente bien cuando se trata de dolores artríticos acompañados de una sensación de frío y temblores, sobre todo si han sentido alivio con fomentos de calor.
Es también conocido por el alivio que proporciona en casos de mareos debido a viajes largos en auto o avión. Para esto puede usarse la tintura y también los dulces de jengibre.
En el caso de quemaduras, se recomienda una infusión o té de jengibre fría para enjuagar las heridas provocadas por la quemadura. No sólo previene infecciones, sino que alivia el dolor asociado con las quemduras.
Es también excelente para aliviar síntomas de resfriados.
Cólicos menstruales: Toma una taza 2 o 3 veces al día. También puedes tomarlo frío, es decir, preparar el té por la mañana y verterlo en una botella para tomarlo como agua durante el día.
Fiebre: En las primeras etapas de una fiebre, cuando sientes escalofríos, un té de jengibre puede ayudarte a calentar tu cuerpo. En herbalismo, a esto se le llama un diaforético estimulante.
Congestión: El jengibre ayuda a que fluya la mucosa y puede deshacer mucosa congestionada. Es un expectorante.
Dolor de garganta: El jengibre es antimicrobial y alivia el dolor. Al tomar un té con miel aliviarás tu dolor de garganta.
Tos: Chupar dulce de jengibre alivia la tos y el dolor de garganta.
RECETA para hacer Dulce de Jengibre
Ingredientes:
medio kilo de jengibre fresco
medio kilo de azúcar morena o un poco menos mascabado
agua
sartén
báscula (de ser posible)
papel encerado
*(Si padeces gastritis, consume poco y después de otros alimentos que protejan tu estómago. Como el chile, café y chocolate, puede irritar estómagos sensibles)
1. No es necesario que peles el jengibre, pero si quieres, puedes prepararlo sin piel. Si no, asegúrate de lavarlo muy bien.
2. Si decides pelarlo, utiliza una cuchara para suavemente raspar la piel.
Una vez que lo has pelado o lavado muy bien, córtalo en rebadas delgadas (no tanto como un papel, pero casi)
4. Deja que empiece a hervir el agua y luego baja el fuego para dejarlo cocer durante 30-40 minutos. Cuando el jengibre quede casi traslúcido, está listo.
5. Cuela el té de jengibre y reserva ¼ de taza. Puedes tomarte el resto, pero quizás quieras diluirlo un poco, porque va a estar muy fuerte!
6. Decide cuánta azúcar usarás. Pesa el jengibre, porque usarás aproximadamente casi la misma cantidad de azúcar que de jengibre.
7. Regresa las rebanadas de jengibre a la sartén.
8. Añade el azúcar y ¼ taza de té de jengibre.
9. Sube la flama a medio-alta y mueve frecuentemente el jengibre. El azúcar se disolverá rápidamente y quedará el jengibre con el azúcar líquida. Cuando esto comience a dar señas de hervir, baja el fuego a medio y sigue mezlando con frecuencia.
10. Toma unos segundos para poner una hoja de papel encerado sobre una superficie plana.
11. El tiempo total que necesitarás dedicarle a este dulce mientras lo mezlas es de 20 minutos. En este tiempo, el líqudo se reducirá y finalmente se cristalizará.
ADVERTENCIA: Si no cuidas el jengibre y lo mezclas con frequencia, se pegará a tu sartén.
12. Una vez que que la mezcla se vea casi seca, retira la sartén del fuego.
13. Pon las rebanadas de jengibre en el papel encerado y deja que enfríen así.
14. Una vez que han enfriado, ponlos en un recipiente con tapa y en un lugar fresco. Puedes conservar así tu dulce durante al menos un par de semanas.
¡Que lo disfrutes! (Su sabor y sus beneficios <3 )
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